Cirugía bariátrica y enfermedad cardiovascular: revisión sistemática y metanálisis
Revista: European Heart Journal
Fecha de publicación: 04/03/2022
Autores: Sophie L. van Veldhuisen, Thomas M. Gorter, Gijs van Woerden, Rudolf A. de Boer, Michiel Rienstra, Eric J. Hazebroek, Dirk J. van Veldhuise
Introducción y objetivo
La obesidad es un problema de salud mundial, asociado a una importante morbilidad y mortalidad, principalmente por causa de enfermedades cardiovasculares (CV). Si bien la cirugía bariátrica se realiza cada vez más en pacientes con obesidad y reduce los factores de riesgo CV, no se ha establecido su efecto sobre la enfermedad CV. Realizamos una revisión sistemática y un metanálisis para evaluar el efecto de la cirugía bariátrica en los resultados CV.
Métodos y resultados
Se realizaron búsquedas de bibliografía en PubMed y Embase hasta agosto de 2021 que compararon pacientes de cirugía bariátrica con controles no quirúrgicos. Los puntos finales fueron la mortalidad CV y por todas las causas, la fibrilación auricular (FA), la insuficiencia cardíaca (IC), el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular. Se incluyeron 39 estudios, todos estudios de cohortes prospectivos o retrospectivos, sin embargo no hubo estudios randomizados disponibles.
La cirugía bariátrica se asoció con un efecto beneficioso sobre la mortalidad por todas las causas [HR: 0,55; intervalo de confianza (IC) del 95 % 0,49–0,62, P < 0,001 vs. controles] y mortalidad CV (HR 0,59, IC del 95 % 0,47–0,73, P < 0,001).
Además, la cirugía bariátrica también se asoció con una incidencia menor de IC (HR 0,50, IC 95% 0,38–0,66, P < 0,001), infarto de miocardio (HR 0,58, IC 95% 0,43–0,76, P < 0,001) y accidente cerebrovascular (HR 0,64, IC 95% 0,53-0,77, P < 0,001), mientras que su asociación con FA no fue estadísticamente significativa (HR 0,82, IC 95% 0,64-1,06, P = 0,12).
Conclusión
La presente revisión sistemática y metanálisis sugiere que la cirugía bariátrica se asocia con una reducción de la mortalidad CV y por todas las causas, y una reducción de la incidencia de varias enfermedades CV en pacientes con obesidad.
Por lo tanto, se debería considerar la cirugía bariátrica en estos pacientes como tratamiento de la prevención de eventos cardiovasculares.
Comentarios
En las últimas décadas, la incidencia y prevalencia de obesidad han ido en aumento. Entre el 40 y 50% de población mundial padece sobrepeso (IMC > 25 kg/m2 y < 30 kg/m2) y obesidad (IMC > 30 kg/m2). Clara es su asociación con diversas patologías (HTA, DM, enfermedad coronaria y cáncer, entre otras).
Se estima que 5 millones de muertes se atribuyen a la obesidad por año, de estas, el 40% aproximadamente se deben a causas de origen cardiovascular.
La cirugía bariátrica ha demostrado mejoría e incluso remisión de diferentes factores de riesgo cardiovascular, pero faltaban datos en cuanto a la evolución de puntos finales duros como mortalidad CV o eventos cardiovasculares.
El mencionado metanálisis demuestra como la cirugía bariátrica presenta un efecto beneficioso sobre la mortalidad por todas las causas y la cardiovascular. Además, también se asoció con una menor incidencia de insuficiencia cardíaca, infarto agudo de miocardio y ACV. No así sobre incidencia de fibrilación auricular.
Un factor importante en el efecto beneficioso de la cirugía bariátrica es, indudablemente, la reducciónn absoluta de peso, aunque varios estudios sugieren que no es el único mecanismo involucrado. Otros factores coadyuvantes podrían ser factores hormonales activados, mejoría en la sensibilidad a la insulina y cambios en la microbiota, por lo que se la recomienda denominar cirugía metabólica.
Las guías de prevención CV europeas del 2016 no le daban lugar a la cirugía bariátrica, y actualmente las guías publicadas en 2021 dice que debe considerearse el tratamiento quirúgico en pacientes obesos de alto riesgo cardiovascular cuando los cambios en el estilo de vida no resultan en una pérdida de peso mantenida en el tiempo (2a A). La recomendación mas fuerte continúa siendo en pacientes con obesidad y diabetes mellitus.
Una limitante es la falta de estudios randomizados que puedan apoyar estas conclusiones sobre los efectos cardiovasculares. Actualmente se está realizando un trabajo aleatorizado sobre FA y cirugía bariátrica.
Por otro lado, varios estudios incluídos solo enrolaban pacientes diabéticos lo que puede representar un bias de selección. Por último, solo se examinó los resultados de las diferentes técnicas combinadas y no se investigaron las potenciales diferencias entre las mismas. El sesgo de inclusión puede jugar un rol importante como confundidor.
Estamos a la espera de estudios randomizados, con nuevos tratamientos farmacológicos incluídos, que permitan robustecer la evidencia hasta acá presentada que ya es muy prometedora.
