«La Moderna me pega mal»: una frase que parece ser una buena noticia

por | 17, Oct, 2023 | Covid 19, Vacunas

8 minutos de lectura

Analizamos en INFOMED una nota de The New York Times (1) partir de una investigación publicada en medRxix (2) sobre las vacunas Covid-19. La fiebre, los escalofríos y el cansancio pueden ser signos de una producción vigorosa de anticuerpos.

PUNTOS CLAVE

  • La protección contra el SARS-CoV-2 disminuye con el tiempo, y la aceptación de las dosis de refuerzo de vacunas Covid-19, por parte de la población, es baja, en parte por el relato y la experiencia de quiénes se vacunaron, de la presencia de efectos adversos desagradables.
  • Un grupo de investigadores de Estados Unidos analizó el vínculo entre los síntomas posvacunación, los cambios biométricos (temperatura, la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria) y los anticuerpos neutralizantes, después de la vacunación con ARNm (Pfizer-BioNTech y Moderna).
  • Recopilaron datos de adultos (n = 363) que recibieron 2 dosis de BNT162b2 o mRNA-1273, midiendo la concentración de los anticuerpos neutralizantes, 1 y 6 meses después de la vacunación. Completaron, además, encuestas diarias de síntomas durante 6 días a partir de la aplicación de cada dosis, y recogieron mediciones biométricas objetivas (incluida la temperatura de la piel, la frecuencia cardíaca, y la frecuencia respiratoria).
  • Encontraron que ciertos síntomas (escalofríos, cansancio o astenia, malestar general y dolor de cabeza), después de la segunda dosis, se asociaron con aumentos en los anticuerpos neutralizantes 1 y 6 meses después de la vacunación, hasta aproximadamente el 140-160% del nivel de los individuos sin alguno de estos síntomas.
  • Cada síntoma adicional predijo un aumento de los anticuerpos neutralizantes de 1,1 veces.
  • Mayores cambios en la temperatura de la piel y la frecuencia cardíaca después de la segunda dosis predijeron niveles más altos de anticuerpos neutralizantes.
  • La temperatura de la piel tuvo una relación predictiva más fuerte para el nivel de anticuerpos neutralizantes a los 6 meses, que al mes.
  • Vemos acá como, el tener más síntomas después de recibir una vacuna Covid-19, podría ser una buena noticia.

Un nuevo estudio tiene un mensaje alentador para las personas que evitan las vacunas y refuerzos de Covid-19 por la preocupación por los efectos secundarios: los escalofríos, la astenia o cansancio, el dolor de cabeza, y el malestar que pueden seguir a la vacunación pueden ser signos de una respuesta inmune vigorosa.

Las personas que tuvieron esos efectos secundarios después de la segunda dosis de la vacuna Covid-19 tenían más anticuerpos contra el coronavirus al mes, y 6 meses después de la inyección, en comparación con las que no tenían síntomas, según el nuevo estudio.

Los aumentos en la temperatura de la piel, y la frecuencia cardíaca también indicaron niveles más altos de anticuerpos.

Esos síntomas, aunque pueden ser desagradables, en realidad podría estar significando que la vacuna está funcionando.

El estudio en cuestión se publicó a principios de octubre del 2023. No ha sido revisado para su publicación en una revista científica por pares.

El aumento relativo en los niveles de anticuerpos entre quienes experimentaron efectos secundarios fue pequeño y no significa que las personas sin síntomas no desarrollen una fuerte respuesta inmune.

La falta de efectos secundarios no debe tomarse como una señal de que la vacuna no está funcionando.

Un estudio anterior encontró que el 98% de las personas que no sintieron efectos adversos generaron igual grandes cantidades de anticuerpos, en comparación con el 99% de aquellos que tenían síntomas localizados o más significativos.

En otra investigación, publicada el año 2022, observaron las respuestas a la vacuna en 2.354 personas, aproximadamente la mitad de las cuales tomaron un analgésico para aliviar los efectos secundarios de la inyección.

En ratones, los fármacos antiinflamatorios no esteroides, como la aspirina y el ibuprofeno, alteran gravemente las respuestas inmunitarias al coronavirus. Pero en este estudio descubrieron qué, en las personas, los medicamentos NO silenciaban la respuesta inmune a las vacunas Covid-19.

No solo eso, sino que quienes tomaron un analgésico parecían tener más anticuerpos que quienes toleraron los síntomas sin medicación. La explicación más probable para esto no es que los analgésicos aumenten los niveles de anticuerpos, sino que las personas que tienen síntomas tienden a tener una respuesta de anticuerpos ligeramente mayor que las que no los tienen y, por esto, estas, tienen más probabilidades de tomar analgésicos.

El nuevo estudio: cuanto más mal, mejor 

En el nuevo estudio, el Dr. Prather y sus colegas rastrearon los niveles de anticuerpos de las personas a lo largo del tiempo.

Reclutaron participantes del estudio a través de anuncios colocados en diarios, televisión y redes sociales.

Tomaron muestras de sangre de los participantes. Los científicos excluyeron a cualquier persona que tuviera evidencia de una infección por coronavirus antes, o durante el estudio.

Colectaron los síntomas de 363 participantes que recibieron las vacunas Pfizer-BioNTech o Moderna, durante 6 días después de cada dosis. A algunos participantes les dieron dispositivos para medir su temperatura, frecuencia cardíaca y frecuencia respiratoria.

Los resultados: ¿qué encontraron en este estudio? 

Los investigadores encontraron que aquellos que tuvieron 7 efectos secundarios distintos, incluidos escalofríos, cansancio o astenia, malestar general y dolor de cabeza, produjeron casi el doble de niveles de anticuerpos que aquellos que no informaron síntomas.

Un cambio en la temperatura de la piel de solo un grado centígrado predijo niveles de anticuerpos 3 veces más altos, 6 meses después de la segunda dosis.

El estudio midió la protección contra la variante de Wuhan, la versión original del coronavirus. No obstante, estos resultados podrían ser relevantes ante las distintas variantes del SARS-CoV-2 circulantes en la actividad.

Las conclusiones: ¿qué nos deja este estudio?

La protección contra el SARS-CoV-2 disminuye con el tiempo, y la aceptación de las dosis de refuerzo, por parte de la población, es baja, en parte por el relato y la experiencia de quiénes se vacunaron, de la presencia de efectos adversos desagradables.

Un grupo de investigadores de Estados Unidos analizó el vínculo entre los síntomas posvacunación, los cambios biométricos (temperatura, la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria) y los anticuerpos neutralizantes, después de la vacunación con ARNm (Pfizer-BioNTech y Moderna).

Recopilaron datos de adultos (n = 363) que recibieron 2 dosis de BNT162b2 o mRNA-1273, midiendo la concentración sérica de los anticuerpos neutralizantes 1 y 6 meses después de la vacunación. Completaron, además, encuestas diarias de síntomas durante 6 días a partir de la aplicación de cada dosis. Al mismo tiempo, se recogieron mediciones biométricas objetivas, incluida la temperatura de la piel, la frecuencia cardíaca, la variabilidad de la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria.

Encontraron que ciertos síntomas (escalofríos, cansancio o astenia, malestar general y dolor de cabeza), después de la segunda dosis, se asociaron con aumentos en los anticuerpos neutralizantes 1 y 6 meses después de la vacunación, hasta aproximadamente el 140-160 % del nivel de los individuos sin alguno de estos síntomas.

Cada síntoma adicional predijo un aumento de los anticuerpos neutralizantes de 1,1 veces.

Mayores cambios en la temperatura de la piel y la frecuencia cardíaca después de la segunda dosis predijeron niveles más altos de anticuerpos neutralizantes.

La temperatura de la piel tuvo una relación predictiva más fuerte para el nivel de anticuerpos neutralizantes a los 6 meses, que al mes.

Vemos acá como, el tener más síntomas después de recibir una vacuna Covid-19, podría ser una buena noticia.

Sobre el autor

Ramiro Heredia

Ramiro Heredia

AUTOR

Médico especialista en Medicina Interna. MN 117.882 – Egresado de la Universidad de Buenos Aires. Médico de Planta, Séptima Cátedra de Medicina – Hospital de Clínicas José de San Martín. Coordinador del módulo Clínico, Curso bienal de Emergentología – SAPUE. Asesor Médico, Gerencia Médica de Urgencias, OSDE. Contacto IG > @ramiroherediaok

Anuncian este espacio

Notas relacionadas

¿Buscás más contenido?

CONGRESO CLÍNICAS 2024

AUSPICIAN ESTE ESPACIO

Calendario

mayo 2024
L M X J V S D
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728293031  

Pin It on Pinterest

Share This