Entre las lecciones aprendidas con el Covid-19 se consideran:
– La necesidad del aumento de camas disponibles, y la falta de personal capacitado, para ese incremento.
– El contacto con los pacientes, debió minimizarse. Más aún, en una enfermedad transmitida por gota y aerosoles, en donde el recambio de aire, era prioritario.
– El equipo de salud, sintió su vulnerabilidad e impotencia, requiriendo apoyo emocional.
– Las medidas de aislamiento, llegaron para quedarse, el uso de barbijo y distanciamiento, demostraron que el cumplimiento de tales recomendaciones, ha disminuido la incidencia de otras enfermedades transmitidas por la vía aérea.
– La comunicación, tanto en el paciente ambulatorio, como en la internación, fueron herramientas fundamentales.
– Los suministros, como la documentación requerida; desde lo administrativo deberán priorizarse.
– Las disparidades sociales, han demostrado una mayor morbimortalidad en los pacientes que las padecen.
La experiencia adquirida, será fundamental en la atención del día a día, como también para futuras emergencias.