Las nuevas recomendaciones del CDC (1) están destinadas a ayudar a prevenir la enfermedad grave. Revisamos una reciente publicación de The New York Times al respecto (2).
El CDC de los Estados Unidos actualizó sus recomendaciones para el Covid-19 en la comunidad y el ámbito escolar, el 4 de agosto.
Se relajaron varias recomendaciones clave:
- Las personas que están expuestas al virus (es decir, los contactos estrechos), ya no necesitan estar en cuarentena en el hogar, independientemente de su estado de vacunación, pero deben usar una máscara durante 10 días, y hacerse una prueba de Covid-19 el día 5.
- Las pruebas de vigilancia de rutina, en personas sin síntomas, ya no se recomiendan en la mayoría de los entornos.
- Las personas que dan positivo en una prueba Covid-19 deben aislarse en su casa durante al menos 5 días. Del día 6 al 10, salen del aislamiento, pero deben evitar estar cerca de personas con riesgo de padecer Covid-19 grave, usar una máscara de alta calidad cuando esté en el interior con otras personas en el hogar y en público, y no ir a lugares donde no puedan usar una mascarilla (por ejemplo, a una cena con otras personas). Recién al día 11 de la fecha de inicio de síntomas, puede aliviar las restricciones.
- Sigue la recomendación de uso de máscara en espacios interiores, en lugares donde los niveles de circulación en la comunidad de covid-19 son altos.
Las nuevas pautas están destinadas a ayudar a prevenir la enfermedad grave. Los cambios señalan una nueva fase de la pandemia, la de «convivir» con el Covid-19, un virus que llegó para quedarse.
Los altos niveles de inmunidad de la población debido a la vacunación y la infección previa, y las muchas herramientas disponibles para proteger a las personas de la enfermedad grave y de la muerte, generan un contexto diferente para el Covid-19.
Destacan además la importancia de la vacunación y otras medidas, incluidos los tratamientos antivirales y la ventilación de los ambientes. Las nuevas pautas representan un enfoque pragmático para vivir con el virus a largo plazo.
Aclararon que la pandemia no terminó, y que es posible que se necesiten medidas más estrictas en caso de nuevas variantes o futuros aumentos repentinos del número de casos.
Con BA.5, la variante de Ómicron de rápida diseminación, Estados Unidos está registrando más de 100,000 casos y casi 500 muertes por día, en promedio. Aunque casi todos los estadounidenses ahora son elegibles para vacunarse, muchos no están al día con sus vacunas:
- El 30% de los niños de 5 a 11 años, y el 60% de los de 12 a 17 años, han recibido su esquema primario de vacunas Covid-19.
- Entre los adultos mayores de 65 años, que son aquellos con mayor riesgo de enfermedad grave, el 65% ha recibido un refuerzo.
Las terapias críticas, como los tratamientos antivirales, siguen siendo de difícil acceso para muchos.
