Un reciente informe del servicio de salud británico registró que 2 millones de personas tienen síntomas de Covid-19 prolongado y que un número sustancial tiene síntomas a 2 años de la enfermedad. Éstos son los puntos destacados.
El Reino Unido tiene una población de más de 67 millones de habitantes. Registra 22.5 millones de casos de Covid-19, y 179 mil muertes desde el comienzo de la pandemia.
Un reciente informe de la Oficina Nacional de Estadística (ONS, por su sigla en inglés) publicó una cifra alarmante: se estima que 2 millones de británicos experimentan síntomas de Covid-19 prolongado. Los resultados fueron comentados en The BMJ (1).
La cifra surge del análisis de síntomas autoreportados a partir de 296.868 respuestas de la Coronavirus (Covid-19) Infection Survey (encuesta de infección por coronavirus) colectadas durante 4 semanas, hasta el primero de mayo.
Se les preguntó a los participantes si tenían síntomas, más allá de las 4 semanas del diagnóstico de Covid-19. La muestra de pacientes es representativa de las personas viviendo en hogares privados, y no incluyó a individuos que viven en prisiones, residencias, escuelas o casas de cuidado.
El Covid-19 prolongado afectó la actividad diaria en 1.4 millones de personas (71%), y el 20% reportó que le había limitado «mucho» su actividad diaria.
De los 2 millones de personas con síntomas:
- 1.4 millones tuvieron Covid-19 tres meses antes
- 826.000 tuvieron Covid-19 un año antes
- 376.000 tuvieron Covid-19 dos años antes
Los síntomas más frecuentes fueron:
- Astenia o cansancio (55%)
- Disnea (32%)
- Tos (23%)
- Dolores musculares (23%)
Los pacientes que más reportaron síntomas de Covid-19 prolongado tenían de 35 a 69 años, un porcentaje mayor de mujeres, y en general eran de áreas más pobres, o trabajaban en asistencia social, educación o salud. También fueron más frecuentes en los que tenían alguna comorbilidad o discapacidad.
Lo más preocupante de este reporte es quizás que 376.000 personas llevan 2 años de síntomas prolongados. Este número inevitablemente va a subir, a medida que se contagien cada vez más personas con el SARS-CoV-2, ola tras ola.
No deja de ser esto un problema muy importante para la salud pública global.
Referencias