Se publicó el 4 de noviembre del 2021 en JAMA el Editorial Comprendiendo las infecciones irruptivas después de la vacunación con ARNm SARS-CoV-2, por M. Komplas, quién analiza un trabajo de M. Tenforde, publicado en el mismo número de la Revista.
Considera que las personas completamente vacunadas, siguen en riesgo de contraer infecciones por SARS-CoV-2, en particular con la variante Delta.
Puntualiza que, a fines de octubre, 1 de cada 3 pacientes hospitalizados en Massachusetts por Covid-19 (el 35% de 519 pacientes), estaba completamente vacunado. Y recuerda el hecho que, en julio del 2021, en el informe elevado al CDC de los eventos del 4 de julio en una región de los Estados Unidos, en personas vacunadas, cuando se infectaban, las cargas virales eran tan altas como en los no vacunados, aunque estudios en la dinámica viral, sugerían una disminución más rápida (esto llevó al CDC a cambiar las recomendaciones e indicar el uso de barbijos en lugares interiores, independientemente del estado de vacunación, en áreas con transmisión sustancial o alta de SARS-CoV-2).
Por otra parte, ya sabemos que las vacunas no solo disminuyen la tasa de transmisión, por lo antedicho, sino que también la gravedad de la enfermedad: a partir del 28 de agosto del 2021, la tasa de hospitalización ajustada en los Estados Unidos, en mayores de 18 años, fue de 83,6 por 100.000 personas, para los no vacunados, versus 4,5 por 100.000 personas, en los vacunados (18.57 veces menos riesgo en los vacunados).
Tenforde con sus colaboradores, en el artículo publicado, llevó a cabo un estudio de caso/control entre 4513 internados en 18 estados de los Estados Unidos, entre marzo y agosto del 2021; compara 1983 pacientes con diagnóstico de Covid-19 sintomático y con test positivo, frente a 2530 hospitalizaciones de control negativos para Covid-19 (es decir, con test negativo y sin clínica compatible con Covid-19).
Encontraron que el 15,8% de los casos estaba completamente vacunado, frente al 54,8% con una razón de probabilidades ajustada (ORa) de 0,15. Esto se corresponde con una efectividad estimada de la vacuna del 85% para prevenir la hospitalización por Covid-19.
Un punto a resaltar es la relación entre la fuerza de la asociación entre la hospitalización por Covid-19 y la vacunación, dependiendo del estado inmunológico de los pacientes:
- Entre los pacientes hospitalizados inmunocompetentes, 11,2% eran vacunados, versus 53,5% de los controles (ORa 0,10).
- Entre los pacientes hospitalizados inmunocomprometidos, 40,1% eran vacunados, versus 58;8% de los controles (ORa 0,49).
Lo mismo ocurría con la gravedad, con el riesgo de ingreso a UTI (Unidad de Cuidados Intensivos) y con el riesgo de requerir ARM. Por último, entre 1197 hospitalizados, 147 de los vacunados eran de más edad, y mayor número de comorbilidades, que los 1055 de los controles.
Para finalizar, el editorial nos da pautas optimistas, y algunas pesimistas:
- Las vacunas basadas en ARNm analizadas aquí son efectivas respecto a la prevención de las hospitalizaciones, beneficio aún presente con la variante Delta, y el mismo se conserva en cuanto a la gravedad y al riesgo de ingresar a Cuidados Intensivos o requerir asistencia respiratoria mecánica.
- Las preocupaciones están en la respuesta en los inmunocomprometidos, y en la disminución de la respuesta inmune, con el tiempo. Esta reciente publicación abona en favor de las dosis adicionales, pregunta frecuente y que se relaciona con las poblaciones recomendadas, por la DINACEI (Dirección de Control de Enfermedades Prevenibles) del Ministerio de Salud de Nación y por el Ministerio de Salud de CABA.