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Candida auris: ¿Qué es el superhongo que afectó a 2 pacientes en Argentina y puso en alerta a las autoridades sanitarias locales?

por | 3, Nov, 2022 | Infectología

8 minutos de lectura

Revisamos en INFOMED la Página para Pacientes de JAMA, la revista de la prestigiosa Asociación Médica Américana, en la que nos acercan todo lo que hay que saber para explicar a los pacientes acerca de este peligroso hongo (1).

PUNTOS CLAVE

  • Cándida auris es un hongo de la familia de la Cándida, una levadura ya conocida, que surgió en el año 2009, y ha causado brotes en hospitales y en asilos de ancianos.
  • Puede generar infecciones graves, y su mortalidad puede llegar hasta un 60%. Se puede transmitir de persona a persona. El manejo es con aislamiento de contacto, y el tratamiento, para algunas variantes, es solo de sostén.
  • Los pacientes susceptibles en general son aquellos que están gravemente enfermos, con un tiempo prolongado de estadía en un hospital o centro de cuidados crónicos, con heridas quirúrgicas, o requerimiento de catéteres por distintos motivos, y/o alguna condición médica que debilite su sistema inmune. 
  • En Argentina, recientemente se detectaron 2 casos de infección por Cándida Auris, que pusieron en alerta a las autoridades sanitarias locales (2).

¿Qué es la Cándida auris?

Las levaduras, que son un tipo de hongos, pueden infectar a las personas, y uno de los tipos comunes de levadura se llama Cándida.

La especie Candida auris no se reconoció hasta el año 2009. Muchas formas genéticamente no relacionadas de Candida auris han surgido en diferentes partes del mundo, por razones desconocidas. 

El uso de medicamentos antimicóticos en personas o animales, o fungicidas en la agricultura, puede haber desempeñado algún papel en su aparición en el mundo.  

Esta levadura ha causado brotes de infección en hospitales y en residencias de ancianos. 

A diferencia de otras levaduras, que se originan en el cuerpo humano (muchas son colonizantes de la piel y del tracto digestivo), Cándida auris puede adquirirse en el entorno de atención médica (es decir, en los hospitales, sanatorios y salas donde hay pacientes), y propagarse de un paciente a otro.

Cándida auris puede causar infecciones graves del torrente sanguíneo (lo que se conoce como funguemia), el intestino, las heridas, y otros sitios. 

Algunas infecciones son resistentes a todos los medicamentos antimicóticos conocidos, y no responden al tratamiento; las tasas de mortalidad por esta infección pueden llegar al 60%. 

Algunos pacientes pueden tener Cándida auris en la piel, en el recto, en heridas, o en la boca, pero se sienten bien y no tienen síntomas de infección. Esta condición se llama colonización asintomática, y el tratamiento con medicamentos antimicóticos, no elimina la colonización por Cándida auris.

¿Cómo se contrae la Cándida auris? 

Las personas que contraen la infección por Cándida auris, con frecuencia están muy enfermas, tienen muchas enfermedades, y tienden a permanecer en los centros de atención médica durante mucho tiempo (es decir, en general son pacientes gravemente enfermos, y que están hospitalizados o en centros de cuidados crónicos, bastante tiempo). 

Los pacientes con inmunidad deteriorada, o que requieren sondas de alimentación, y catéteres intravenosos o urinarios, tienen un alto riesgo de contraer la infección por Cándida auris. 

Las personas sanas, incluidos los trabajadores de la salud, con muy raras excepciones, no se colonizan ni se infectan con Cándida auris. Como resultado, no se recomienda la detección de rutina de contactos de pacientes con Cándida auris, a menos que también estén ingresados ​​en un centro de atención médica (esto quiere decir que en personas sanas, sin síntomas, que no estén hospitalizadas, no se hacen pruebas para buscar este hongo).

¿Cómo se controla y previene la propagación de Cándida auris? 

La detección de Cándida auris es difícil en la mayoría de los hospitales. La mayoría de los laboratorios clínicos no tienen la capacidad de diferenciar Cándida auris, de otras levaduras. 

Los médicos deben sospechar específicamente una infección por Cándida auris, y enviar cultivos de levadura a laboratorios especiales para su confirmación. 

Al ser admitidos en el hospital, los pacientes (o sus familias) deben alertar a los médicos si han tenido un diagnóstico de Cándida auris, o si han estado en un centro de atención médica dónde este hongo haya generado infecciones.

Si existe la preocupación de que un paciente haya estado expuesto a Cándida auris, se debe indicar el aislamiento, como medida de prevención, hasta que se confirme el diagnóstico.

El aislamiento de Cándida auris requiere ubicar a los pacientes en habitaciones privadas, o ubicar juntos a los pacientes con diagnóstico de Cándida auris.

Todo el personal de atención médica, y los visitantes, deben usar batas (camisolín) y guantes al ingresar a la habitación. Además, tienen que lavarse las manos con frecuencia. 

El ambiente de la habitación se limpia frecuentemente con desinfectantes especiales. Los cultivos de las muestras obtenidas de los pacientes, pueden desarrollar Cándida auris hasta 3 meses después de que se haya detectado por primera vez.

Se pueden repetir los cultivos para ver si se puede interrumpir el aislamiento.

En los centros de cuidados crónicos, como los geriátricos y centros de rehabilitación, los pacientes infectados con Cándida auris pueden asistir a actividades grupales, si son capaces de lavarse las manos, usar ropa limpia, si tienen heridas que puedan contenerse con vendajes limpios, y si las áreas comunes se desinfectan con frecuencia.

En resumen…

Cándida auris es un hongo de la familia de la Cándida, una levadura ya conocida, que surgió en el año 2009, y ha causado brotes en hospitales y en asilos de ancianos. 

Es resistente a todos los tratamientos antimicóticos conocidos, y es difícil de diagnosticar, por lo cual se requiere un alto índice de sospecha, por parte del personal sanitario, para buscarla y encontrarla, a través de medios de cultivo y pruebas diagnósticas especiales.

Puede generar infecciones graves, y su mortalidad puede llegar hasta un 60%. Se puede transmitir de persona a persona. El manejo es con aislamiento de contacto, y el tratamiento, de sostén.

Los pacientes susceptibles en general son aquellos que están gravemente enfermos, con un tiempo prolongado de estadía en un hospital o centro de cuidados crónicos, con heridas quirúrgicas, o requerimiento de catéteres por distintos motivos, y/o alguna condición médica que debilite su sistema inmune. 

En Argentina, recientemente se detectaron 2 casos de infección por Cándida auris, que pusieron en alerta a las autoridades sanitarias locales (2).

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Sobre el autor

Médico especialista en Medicina Interna. MN 117.882 – Egresado de la Universidad de Buenos Aires. Médico de Planta, Séptima Cátedra de Medicina – Hospital de Clínicas José de San Martín. Coordinador del módulo Clínico, Curso bienal de Emergentología – SAPUE. Asesor Médico, Gerencia Médica de Urgencias, OSDE. Contacto IG > @ramiroherediaok

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