Confirmaban que se había tratado de un error de laboratorio, de una «contaminación».
El 21 de enero se publicó en Nature Deltacron: la historia de la variante que no fué (1), en que desmentían las noticias surgidas el 7 de enero que hablaban de una nueva «supervariante» que combinaba a Delta y Ómicron, que se diseminaba rápidamente, a partir de una publicación en Chipre. Confirmaban que se había tratado de un error de laboratorio, de una «contaminación».
En 11 de marzo se publicó en The New York Times, y se actualizó en 15 de marzo, La nueva variante «Deltacron» es rara y similar a Ómicron, dicen los expertos, en la que ahora sí, un grupo de científicos afirma haber encontrado una nueva variante del coronavirus, un híbrido entre Delta y Ómicron, en Europa y Estados Unidos.
Algunos la apodaron Deltacron y Deltamicron. Por el momento, no recibe este nombre entre los científicos. La llaman AY.4/ BA.1. un nombre probable que puede llegar a recibir es XD.
En febrero, un científico del laboratorio de Salud Pública de Washington, mientras revisaba GISAID (3), una gran base de datos que contiene genomas de SARS-CoV-2 de todo el mundo, encontró algo extraño en muestras recolectadas en Francia.
En casos caros, un individuo puede tener una infección simultánea por Delta y Ómicron, siendo esto una confección, no una nueva variante. Pero acá vio que cada muestra del virus tenía una combinación de genes de ambas variantes. Revisó también muestras de Países Bajos y Dinamarca, verificó los datos con virólogos del Instituto Pasteur, en París, y llegaron a una conclusión: se trataba de una variante híbrida.
El 8 de marzo los investigadores publicaron el primer genoma en GISAID de AY.4/BA.1
¿Es más peligrosa que Ómicron?
En primer lugar, es extremadamente rara esta recombinación. Pareciera existir desde enero, pero no se ha diseminado exponencialmente. Por sus características no debería representar una nueva fase de la pandemia o una nueva ola.
La inmunidad adquirida por las vacunas y por la infecciones podría ser efectiva para neutralizar la proteína S de la variante híbrida. La superficie de Deltacron es similar a Ómicron, por lo que se debería esperar la misma efectividad de la inmunidad para defendernos de la infección.
Por el momento, no parece ser que esta sea una nueva variante de preocupación. La Organización Mundial de la Salud reconoció la existencia de AY.4/ BA.1 (4). No sabremos si tendrá algún papel en la evolución de la pandemia, hasta dentro de varias semanas.
Referencias